California, la quinta economía mundial, frente a un reto apoteósico

*Tiempos de grandes obstáculos son tiempos también de cambios y nuevas oportunidades y ahí es donde seguramente sus gobernantes, empresarios y demás sectores sociales tienen una visión y un enfoque para revitalizar a la entidad.
José Romero Mata
California enfrenta un reto de niveles apoteósicos a fin de poder mantenerse y seguir siendo identificada como la quinta economía más grande del mundo en caso de que fuera un país. Por un lado tiene un panorama desolador con la pobreza extrema de muchas de sus regiones, la degradación social y el aumento del crimen; también por el caos por la inestabilidad financiera y económica en el mundo y no se diga del aumento inflacionario que enfrenta el estado en vivienda y el costo de vida a pesar de que el salario mínimo ya alcanza aquí los 20 dólares por hora.
El llamado estado dorado, que fuera territorio mexicano hace más de siglo y medio, en unos cien años alcanzo un poderío que a la fecha le ha permitido ser ejemplo de avance y modernidad y por supuesto del hecho de formar parte de la nación más rica del mundo pero por si sola ha logrado edificarse como la meca del cine en Hollywood, la meca de la industria cibernética en Silicon Valley
En 1850 California fue reconocida como uno de los estados que conforman a los Estados Unidos; en 1911 se funda Hollywood que es considerada la más grande industria cinematográfica en el mundo; el puente Golden Gate en San Francisco fue inaugurado en 1937, en 1957 fue lanzado el primer disco duro en Silicon Valley y el puerto marítimo de Los Ángeles es el más ocupado de Estados Unidos y uno de los más grandes del mundo.
En el año 2022 California fue ubicada como la quinta economía mundial y su Producto Interno Bruto de 3.9 billones de dólares por sí mismo podría sumar a los ingresos totales de países como México y junto con este otras naciones de centro y Sudamérica en conjunto.
Pero en los últimos dos años más de 500 mil personas han emigrado de este estado en busca de otros estados que ofrecen costos más económicos y modestos porque las rentas son caras con rentas que oscilan de los 1500 a cuatro mil dólares mensuales por promedio dependiendo de las áreas y si se pretende la compra de una casa de tres a cuatro recamaras el precio promedio es de 750 mil dólares y ese monto es más de dos veces lo que sería comprar una casa en el estado de Texas en donde el promedio es de 336 mil dólares.
California tiene el impuesto estatal sobre la renta más alto del país 13.3 por ciento mientras que nueve estados de EU incluidos Texas y Florida tienen una tasa cero.
Desde el 2018, 441 sedes de empresas han abandonado a California y se han ido a Texas, Florida y Tennessee entre otras opciones más económicas.
El ferrocarril de California que se pretende revolucionar el transporte en el estado no ha sido terminado aún y su costo inicial se ha triplicado y lleva ya un retraso de 14 años en su terminación.
La crisis del agua sigue siendo una bomba de tiempo y no se ha buscado una solución lo que ha complicado todo a pesar de que ya son varias décadas en donde los residentes y empresas han sufrido a causa de severas sequias.
El problema de los llamados homeless (personas sin vivienda y que viven en calles) es una bomba de tiempo que ya ha explotado en algunas regiones como Los Ángeles y San Francisco en donde la delincuencia, promiscuidad, drogas y prostitución se han multiplicado a niveles de epidemia.
Tan solo en Los Ángeles el número de personas sin hogar aumentó 56 por ciento entre el 2015 y el 2022 y no se ve que pueda ser contenido.
Los niveles de inseguridad publica cada vez son más evidentes en áreas residenciales que hace una década eran tranquilidad y con reportes de cero criminalidad pero ahora los actos vandálicos, robos y ataques a residentes ya son parte de la vida cotidiana y más en zonas urbanas.
En abril del 2023 el salario mínimo en negocios de comida rápida aumento a 20 dólares por hora pero eso por sí mismo ha desatado niveles altos de desempleo luego de que las compañías se han visto obligadas a despedir personal para solventar sus nuevos presupuestos.
El reto es enorme y no será fácil pero como bien dicen tiempos de grandes obstáculos son tiempos también de cambios y nuevas oportunidades y ahí es donde seguramente sus gobernantes, empresarios y demás sectores sociales tienen una visión y un enfoque para revitalizar a la entidad.